Por primera vez en el Paraguay un sacerdote procesado tras denuncias por pedofilia es sentado en el banquillo de los acusados y enfrenta juicio oral y público. Allí no solo estarán testigos, sino también declararán las víctimas. La Fiscalía acusó al religioso de abuso sexual de niños y asegura que demostrará la culpabilidad del vicario.
El cura se expone a entre 3 y 5 años de cárcel en caso de ser hallado culpable por el Tribunal de Sentencia, integrado por Héctor Capurro (presidente), Cynthia Lovera y Juan Carlos Zárate.
En sus alegatos, la fiscala Clara Ruiz Díaz dijo que el sacerdote primero se ganó la confianza y que habría ocurrido a final del año 2013, según la investigación.
La denuncia fue presentada por los padres de las víctimas. En principio fueron 3 adolescentes, aunque uno de ellos se retractó tras un careo entre el sacerdote, la víctima y una catequista.
Ella agregó que en el cotejo los niños dijeron que el religioso los abrazaba, besaba y que algunas veces les tomaba las manos y les hacía tocar sus partes íntimas. El hecho salió a la luz luego que uno de los chicos de 13 años dijo a su madre que ya no quería ir a misa.
(La Nación, última Hora y Abc Color – 3 de noviembre de 2016).
