La protección contra la violencia, un desafío para las próximas autoridades

La violencia contra los niños, niñas y adolescentes sigue siendo una práctica común en diversos ámbitos, desde las casas y las escuelas, hasta el mismo sistema judicial. Uno de los desafíos de las próximas autoridades a ser electas el 21 de abril será justamente encarar acciones para lograr una mayor  protección  contra maltratos y abusos.
Según el  Estudio sobre maltrato infantil en el ámbito familiar, realizado por  Unicef en colaboración con la organización BECA, el 61% de los niños y niñas reportó algún tipo de violencia física y psicológica.
Aunque seis de cada diez niños declararon ser víctimas de maltratos en el hogar, el 91,9% consideró que tiene una buena relación con sus padres, según esta investigación que abarcó un universo de 132.687 niños, niñas y adolescentes de entre 10 a 18 años de escuelas públicas y privadas, incluyendo indígenas.
A pesar de los altos porcentajes de niños y niñas que sufren maltratos, la mayoría de los  adultos no considera que los castigos físicos ayuden a educar, según la Encuesta Nacional sobre Violencia Doméstica e Intrafamiliar, realizada por investigadoras del Centro de Documentación y Estudios.
La primera Encuesta nacional de niños, niñas y adolescentes, editada por la Coordinadora por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia (CDIA), muestra que el 32,58% de entrevistados considera normal que un padre le pegue a su hijo o hija. Sin embargo, el 85,85% se anima a denunciar un caso de violencia contra un niño, niña o adolescente.
En ese sentido, Paraguay se enfrenta a serias dificultades para la recopilación sistemática de datos, debido a la carencia de un sistema que integre la información de las diferentes puertas de entrada donde se realizan las denuncias (comisarías policiales, Fiscalía, Fono
Ayuda 147, Sistema 911, Codeni, entre otros). Sin embargo, se registra un considerable aumento de las denuncias por abuso sexual en niños y adolescentes: de 788 anotadas en 2005 se triplicó a 2.298 en 2010. En tanto que el Ministerio Público contabiliza una tendencia ascendente de casos, que va de 651 causas ingresadas en 2005 a 804 en 2010.
La violencia contra la infancia es una violación de los derechos humanos. Paraguay carece de una ley específica que haga referencia a la protección contra la violencia hacia niños, niñas y adolescentes. La regulación del fenómeno  se encuentra en la ley 1600/00 Contra la violencia doméstica y el Código Penal paraguayo.
Unicef y el Frente por la Niñez, que está conformado por 12 organizaciones que trabajan por los derechos de la infancia, consideran que las próximas autoridades a ser electas el 21 de abril tendrán como desafíos concretos:
1.    Aprobar un marco legislativo para la protección de la niñez.
2. Desarrollar campañas de sensibilización de la ciudadanía sobre la aplicación de alternativas educativas de niños y niñas sin violencia en el hogar, escuela y comunidad.
3.    Promover la denuncia, el registro, la sistematización, el análisis y la difusión de datos sobre casos de violencia y abuso hacia los niños, niñas y adolescentes.
4. Desarrollar redes de prevención y protección contra toda forma de violencia, articulando las diferentes respuestas desde el Estado, la comunidad y el sector privado.
5. Prevenir la trata a través de formación en las escuelas y en las familias, y mejorar la atención psicosocial a las víctimas.
6. Aplicar de manera efectiva mecanismos estatales de apoyo a las víctimas durante todo el proceso de recuperación y garantizar la no revictimización durante el mismo, incluyendo su no exposición ante los medios de comunicación.
7. Promover la cultura de la paz y el desarrollo de mecanismos para una crianza positiva y efectiva.


Una ley en espera

Los próximos parlamentarios tendrán en sus manos la aprobación de una ley contra el castigo físico y los tratos  humillantes, borrador redactado por la Comisión Intersectorial de Prevención y Atención a la Violencia hacia los niños, niñas y adolescentes (en su forma abreviada Mesa País).
Luz Domínguez, enlace legislativo por la organización Global Infancia, dice que la aprobación de esta ley queda pendiente para el próximo periodo parlamentario.
Si bien el Código de la Niñez y la Adolescencia enuncia las formas y mecanismos para realizar las denuncias no está claramente establecido todo lo referente a la violencia familiar, escolar y de otros ámbitos. Con este instrumento se establecerán instrucciones claras para todas las instituciones encargadas de velar por la protección de la infancia y la adolescencia.