El 30 de Setiembre se celebra el día de la Educación Pública en Uruguay. En nuestro país la educación cumple un papel social muy importante, como transmisora de conocimientos, valores y costumbres. Como medio de socialización y de formación, la Enseñanza es un medio de movilidad social y de realización personal. A pesar de las crisis, las pasadas y las actuales, su rol continúa vigente.
EDUCACIÓN: DERECHO HUMANO
La educación es un derecho humano fundamental y una herramienta de crecimiento de las personas y por ende debe ser prioridad del Estado garantizar dicho derecho. Así lo establece la ley de General de Educación que rige desde el año 2008 en nuestro país.
«Artículo 1º.- (De la educación como derecho humano fundamental).
Declárese de interés general la promoción del goce y el efectivo ejercicio del derecho a la educación, como un derecho humano fundamental. El Estado garantizará y promoverá una educación de calidad para todos sus habitantes, a lo largo de toda la vida, facilitando la continuidad educativa.»
Los educandos son los destinatarios de este derecho, y por lo tanto deben de tener una actitud crítica, activa y transformadora de la educación, proponer cambios, participar en la elaboración de planes y proyectos. La actual Ley General de Educación propone la participación de educandos como sujetos activos en la apropiación de contenidos y conocimientos.
En la Convención sobre los derechos del Niño se establece que los Estados firmantes deben reconocer el derecho del niño a educarse, con el objetivo de poder realizarse y desarrollarse en condiciones de igualdad de oportunidades. De esta manera los países parte deben instituir la enseñanza obligatoria y gratuita para todos los niños, niñas y adolescentes. Los Estados deben garantizar que todos los niños tengan acceso a la información y sean orientados en temas referidos a la educación y a la profesión.
La libertad de expresión, de buscar, recibir y difundir ideas, opiniones por cualquier medio que elijan es un derecho fundamental con el que el niño, niña y adolescente cuenta.
PARTICIPACIÓN Si buscamos en el diccionario de la Real Academia Española la definición de Participación encontramos un concepto muy escueto «Acción y efecto de participar» y Participar «Dicho de una persona: Tomar parte en algo». Pero si recurrimos al documento del Instituto Interamericano del Niño (IIN) «Menú de Indicadores y Sistema de Monitoreo del Derecho a la Participación de Niños, Niñas y Adolescente», el mismo establece que la participación puede identificarse como un derecho y como un proceso. «La participación como derecho es un derecho civil y político. La participación como proceso envuelve una labor educativa, interactiva, persistente, basada en la motivación, y en la capacidad de fortalecer las competencias de niños, niñas y adolescentes, apuntando a su mayor bienestar, basándose en el principio del Interés Superior del Niño».
El proceso de comunicación y de aprendizaje es el espacio donde la participación se instituye como derecho. El Instituto identifica tres momentos de la participación: la información, para que la acción de participar sea considerada como válida, auténtica. Otro momento es el de la construcción y reconocimiento de la opinión propia y por último el de la expresión y escucha. «Para que la expresión se concrete es necesario que exista una escucha», que debe ser respetuosa y receptiva. «Escuchar implica la voluntad de decodificar el mensaje y tomarlo en cuenta al momento de tomar decisiones». («Menú de Indicadores y Sistema de Monitoreo del Derecho a la Participación de Niños, Niñas y Adolescente». IIN)
VOZ Y VOTO: Los Consejos de Participación «Los consejos de participación son una herramienta muy interesante para los liceos, ya que contemplan estudiantes, profesores, y gente de la comunidad misma, tal vez en un futuro cuando se logre la autonomía educativa en lo que respecta a las instituciones, esto sea de gran ayuda a la hora de toma de decisiones, que sin duda mejoraría la calidad de la educación». Estas son palabras de Pablo del Valle, estudiante de secundaria del departamento de Soriano y delegado estudiantil de los Consejos de Participación.
La Ley General de Educación dispone en el artículo 76 la creación de los Consejos de Educación. Éste establece que en todo Centro Educativo público de los diferentes niveles de enseñanza, inicial, primaria, secundaria y educación técnico profesional, deberán funcionar Consejos de Participación. Estudiantes, docentes, madres, padres o responsables y miembros de la comunidad integrarán dichos consejos. La ley también determina que cada consejo pautará su funcionamiento y forma de elección.
Consultado por el objetivo de creación de los Consejos, el Director de Educación del Ministerio de Educación y Cultura, Maestro Luis Garibaldi comentó: «Los motivos de la creación de los consejos de participación en la Ley de Educación, están vinculados a darle participación a la comunidad en el fenómeno educativo y promover una mayor vinculación en la función y gestión de estos centros con su sector, por lo que se promovió la participación de estudiantes, docentes, padres y la comunidad, teniendo en cuenta que las realidades son distintas en cada nivel educativo.»
Los miembros de los consejos discuten temas relacionados al funcionamiento, gestión del centro educativo, recursos, proyectos educativos, equipo docente, planes de estudio, infraestructura, entre otros, y así se buscan soluciones.
El impulso que Primaria y Secundaria han dado a los consejos de participación ha sido desigual. Como también es diferente el impulso que han tenido en uno y otro nivel y el desarrollo en el interior y en la capital.
«En principio Secundaria ha promovido con mucha fuerza la participación estudiantil que también repercute en este aspecto, lo que ha promovido muchos encuentros. Esto es muy positivo, pero creemos que queda un largo camino por recorrer, porque todavía falta su instalación efectiva en todos los centros, que tenga un funcionamiento regular y por último que posea efectivamente el peso de ser instancias de verdadera participación. Que se instalen no solo en los aspectos formales sino también en los aspectos sustantivos», comentó Garibaldi.
Mientras que en Secundaria se realizan encuentros nacionales de consejos estudiantiles, Primaria se restringe a las instancias fijadas por la ley en cada institución.
La integración y funcionamiento es semejante pero guardan algunas diferencias. A nivel de las escuelas de Primaria lo integrarán el/la maestro/a Director, el Presidente de la Comisión Fomento, dos padres, madres o responsables, dos miembros de la comunidad cercana a la institución, dos docentes y cuatro escolares como máximo. Los alumnos serán representantes de las clases superiores (quinto y sexto) y serán elegidos por sus compañeros. El consejo deberá reunirse por lo menos tres veces al año (abril, agosto y noviembre), aunque podrán reunirse de forma extraordinaria todas las veces que consideren necesario. De cada encuentro se elaborarán actas que se elevaran a los respectivos consejos de enseñanza.
Así lo estableció Leticia Finozzi, Maestra Comunitaria de la Escuela Nº 117 (Salto): «Los consejos deberían reunirse por lo menos tres veces al año, al principio, cuando se conforma el consejo de participación, después en agosto y por último en noviembre, pero se pueden reunir cada vez que la institución crea necesario, que los padres y principalmente los alumnos tengan temas para plantear.»
En Secundaria los estudiantes que integran los consejos son elegidos democráticamente, postulación mediante, los primeros 30 días a partir del inicio de clases. La elección estudiantil es secreta y no obligatoria, y cada grupo elige a su o sus delegados. Los dos liceales más votados conformarán los Consejos de Participación. A partir de esta votación se eligen tres alumnos más para integrar mesas de participación, que serán receptoras de propuestas, inquietudes que serán llevadas a los consejos estudiantiles. En Secundaria los grupos de participación se reúnen todos los meses y en los meses de mayo, julio y setiembre se realizan asambleas ordinarias. Los docentes son elegidos democráticamente y deben postularse; los tres más votados serán los representantes en el Consejo. Los padres e integrantes de la comunidad serán informados por el centro de estudios de la existencia de los consejos y los postulantes son elegidos mediante votación.
PROPUESTAS Y SOLUCIONES
Fabián Sena tiene 12 años, y es alumno de sexto año matutino de la Escuela Nº 117 de la ciudad de Salto. Este año fue elegido como integrante del consejo de participación de su escuela. «La maestra eligió a los que teníamos mejor conducta y que son los más responsables, me eligió a mi y a otros compañeros, y después los otros nos votaron.»
Cuando se le preguntó por las propuestas que tienen más cabida en los consejos, la maestra (Finozzi) y los alumnos concordaron en los temas; «Del baile de fin de año, de los problemas de los recreos, también de lo que nosotros opinamos y queremos y faltan en la escuela, también de las XO… los padres y los maestros nos escuchan y hablan y buscan soluciones de lo que nosotros decimos», afirmó Fabián.
Los pasados 7 y 8 de Setiembre se realizó en Paso Severino, Florida, el IV Encuentro Nacional de Estudiantes. Repetición, desvinculación, desinterés, desmotivación, calidad educativa, planes de estudio obsoletos y poco interesantes, formación docente, obstáculos económicos, discriminación, educación en valores, acceso a materiales e información, fueron algunos de los temas más tratados por liceales de todo el país.
Pero estos adolescentes no se detienen en los reclamos sino que también plantean soluciones.
La desmotivación que sufren cuando asisten a clases es uno de los temas que más les preocupa. Plantean la necesidad de la reformulación y actualización de programas y así evitar la repetición de los temas. Exigen la capacitación docente, actualización pedagógica y didáctica de los educadores. Contar en los liceos con equipos multidisciplinarios para realizar talleres sobre derechos, valores humanos, discriminación y orientación vocacional.
El factor económico es un problema recurrente. Según el estudiante Pablo del Valle, el pago de boletos de transporte público es uno de los tantos obstáculos que los estudiantes de secundaria deben afrontar. Frente a esto, se propuso la gratuidad del boleto para todos los estudiantes de segundo ciclo.
Otra dificultad que se expuso es que hay adolescentes que deben conjugar el estudio y el trabajo. La carga horaria que supone una y otra responsabilidad, en la mayoría de los casos no es compatible. Los estudiantes concuerdan que lo ideal sería que su única y principal actividad fuera la formación educativa y que el Estado debe elaborar políticas públicas para concretar este objetivo. El pago de fotocopias y el escaso acceso a libros en las bibliotecas no escapa de los planteos de los delegados.
La convivencia de los alumnos en los liceos y su relacionamiento también tuvo cabida en la discusión. La discriminación sexual y étnica se hace sentir, la coexistencia de «tribus urbanas», los prejuicios, la discriminación vinculada a la apariencia y la vestimenta son aspectos que preocupan a los y las jóvenes. «Proponemos talleres de eliminación de prejuicios, de reflexión y mejora de convivencia, y además talleres de roles. La discriminación no es solo un problema que surge en el liceo, sino que es un problema grave que viene de la sociedad en la que vivimos», explicó Del Valle.
Pero los integrantes de los Consejos de Participación Estudiantil no dejan de preocuparse por temas más generales y que han ocupado importante lugar en la discusión política y mediática. El aumento de recursos para la Educación, el mal uso de esos fondos, el aumento salarial para docentes, las deficiencias edilicias de los centros de estudios, la calidad educativa, la exigencia y formación que reciben, son algunos de ellos. Se cuestionan si Secundaria los prepara efectivamente para afrontar la educación terciaria.
La profesora Alejandra Errecart, de la Comisión de Participación de los Consejos de Participación de Secundaria, explicó que el Consejo de Educación Secundaria ha dado un gran impulso a estos consejos a partir de la existencia de referentes que están en permanente contacto con las instituciones y los agentes. «La idea es que cada centro trabaje de forma autónoma, que no sean solamente espacios de demanda sino que se generen espacios de cierta autonomía, si bien no cuentan con los recursos presupuestales, que se generen movimientos y que se vayan resolviendo problemas de forma independiente», apuntó.
Cogobierno y autonomía de los centros educativos son palabras que resuenan en estos encuentros «…los Consejos de Participación, los encuentros de Paso Severino, la Mesa Permanente, son cosas nuevas, que buscan eso, que los estudiantes tengan voz, por primera vez estamos teniendo voz, y de a poco se va caminando, en lo personal, no creo que falte mucho para que podamos tener voto y así crear un cogobierno, que seria lo ideal», enfatizó del Valle.
INFORME PAÍS
Uruguay debe presentar en 2011 el Tercer Informe que los Estados partes de las Naciones Unidas remiten al Comité de Derechos del Niño – ONU según lo dispone la Convención sobre los Derechos del Niño.
En este informe, los países signatarios de la Convención sobre los Derechos del Niño, informan a la comunidad internacional del grado de cumplimiento de dicho mandato a nivel país.
Asimismo, Uruguay debe responder en esta oportunidad diversas observaciones que el Comité de Derechos del niño de Naciones Unidas, le realizara para el periodo 2005-2010.
En relación a Educación, Esparcimiento y Actividades Culturales, reclamos y propuestas que docentes y alumnos establecen en los Consejos de Participación coinciden con los planteamientos y sugerencias que el Comité de las Naciones Unidas realiza a nuestro país: «El comité acoge con satisfacción los índices de inscripción prácticamente universales en la escuela primaria y en programas como «maestros comunitarios», sin embargo le preocupan los índices relativamente altos de repetición y abandono escolar, en particular entre niños que viven en la pobreza, varones y afrodescendientes. El Comité lamenta que el gasto público insuficiente en la escolarización durante el período de la preparación del informe afectó la educación en forma negativa, por ejemplo aumentó la proporción alumnos-maestro y falta de oportunidades de capacitación para los maestros.» Observaciones del Comité de Derechos del Niño de Naciones Unidas al Estado Uruguayo –Junio 2007-Haga click aquí (link)
Las Naciones Unidas recomiendan que se mejore la calidad educativa, reforzando partidas presupuestarias. Asimismo, sugiere que se implementen políticas educativas para reducir los altos niveles de repetición y deserción, especialmente en Educación Media.
También equiparar las posibilidades de acceso a la enseñanza de todos los niños, niñas y adolescentes, sin importar el género, color, etnia, nivel socio-económico y origen, poniendo mayor énfasis en brindar oportunidades a las poblaciones más vulnerables.
Invertir tiempo, recursos materiales y humanos en la elaboración de políticas públicas contra la discriminación sexual, étnica y de adolescentes embarazadas, apostando a la incorporación de los DDHH en todos los niveles de enseñanza.
El Comité de las Naciones Unidas recomienda que las voces de los niños sea escuchada, que las Escuelas tengan consejos estudiantiles y que los educandos tengan acceso libre a la información que les competa.
Uruguay está dando un paso muy grande en este sentido, pero como explicó Garibaldi, hay un largo camino que recorrer, y como afirmó Errecart, algunos obstáculos por superar; «La idea es que estos consejos no se conviertan solo en espacios de demanda, que creo que tiene que ver con toda una cultura institucional que tenemos, se piden muchas cosas y no se evalúa como se pueden resolver de forma colectiva. Porque el centro educativo es parte de la comunidad y le pertenece. Es una forma de participación democrática y creo que es eso lo que nos está faltando.»