El derecho a la salud es un mandato constitucional. Precisamente el Gobierno de Unidad y Reconciliación Nacional en su Política Nacional de Salud, asume en su discurso oficial priorizar a la niñez como uno de los sectores «más desprotegidos y restituirle efectivamente el Derecho a la Salud»; además se plantea como meta brindar más mayor acceso, mayor calidad y cariño en el servicio, por tal razón sería interesante conocer la inversión pública en salud relacionada en estos actores sociales.
El Gobierno de Unidad y Reconciliación Nacional, asegura que en los centros de salud y hospitales existe mayor suministro de medicamentos; se impulsa una política de seguridad alimentaria «priorizando a la niñez»; y además entre sus logros destaca que se ha disminuido las muertes maternas infantiles en 15.7 por ciento y las neonatales en 53.7 por ciento.
En relación a los medicamentos señala la distribución de 6,9 millones de dosis de vacunas aplicadas en salud preventiva, al 90 por ciento de niñas y niñas menor de un año; la creación del Modelo de Salud Comunitaria y Familiar basado en que los médicos salen a las comunidades a atender a los pacientitos.
Nicaragua asumió el compromiso de los Objetivos del Desarrollo del Milenio en 2015. Precisamente la Declaración del Milenio fue aprobada por 189 países y firmada por 147 jefes de gobierno en la Cumbre del Milenio de las Naciones Unidas celebrada en septiembre de 2000 en Nueva York, en la que se establecen los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) que ambiciosamente se intenta alcanzar para 2015.
El tema que nos ocupa tiene estrechos compromisos con los objetivos 3, 4 y 6 están íntimamente ligados con la salud de las niñas y niños, los cuales tienen que ver con la reducción de la mortalidad infantil, salud materna y combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras. Puntualmente en materia de salud el Estado se ha comprometido en disminuir en dos terceras partes la mortalidad de niñas y niños menor de 5 años; y cubrir al 100 por ciento de la población infantil menor de un año con la vacuna contra el sarampión.
La pregunta que se han formulado distintas voces especializadas en las materia es que si Nicaragua al ritmo que va logrará alcanzar la meta para el 2015.
Inversión Macro
Diversos monitoreos realizados por Dos Generaciones han confirmado que el tema de la inversión en salud se habla a nivel macro, y poco o nada esfuerzo se ha realizado para abordar de manera puntual cuál es la inversión en salud en estos actores sociales.
Los medios de comunicación cuando abordan la inversión en salud suelen hacerle de forma genérica, poniendo el acento únicamente en indicadores macro particularmente sobre la inversión en salud. A manera de ejemplo, recientemente La Prensa publicó un informe del Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (IEEPP) sobre la inversión en infraestructura para la atención hospitalaria. El énfasis de la publicación señala que el presupuesto en 2011 será de 5,171 millones de córdobas, pero que en términos reales por el deslizamiento de la moneda, serán 13 millones de dólares menos en relación al 2010.
La inversión en salud ha sido un debate contemporáneo. Se trata de una oportunidad y un derecho para que las niñas y niños puedan gozar de esta prerrogativa tan necesaria para el desarrollo de la familia, comunidad, sociedad y la misma gestión pública. Por ello en varios momentos estudiosos sobre el tema han advertido la necesidad que el Estado invierta más en salud para que la niñez tenga más acceso.
¿Por qué es importante?
La Política Nacional de Salud reconoce que las altas tasas de mortalidad materna e infantil y de morbilidad especifica por enfermedades transmisibles (diarreicas, respiratorias, de transmisión sexual, VIHSIDA, y de transmisión vectorial, así como las causas externas accidentes de transito y violencia, encabezan la lista de las principales cuadros que atender ¿se conoce cuánto se invierte específicamente para la niñez en este tipo de casos?
Conocer la inversión en este tema es de suma importancia para tomarle el pulso a las políticas públicas en materia de salud dirigida a la niñez; pero también para contrastar el discurso oficial frente a la realidad que vive la niñez cuando se le he negado el derecho a la salud, por diversos factores: falta de acceso, déficit en infraestructura y médicos, inversión pér capita en medicamentos, etc.
A manera de ejemplo, se conoce que la inversión en vacunas neumococo en promedio es de US$100 por niña y niño, tomando como referencia los costos que el MINSA maneja en el mercado de servicio de salud privado. Sin embargo, aún se desconoce cuál es total en la inversión en el resto del servicio médico pensada para estos actores.
Inversión en infraestructura
El informe del IEEPP (2010) sobre inversión en infraestructura para atención hospitalaria, afirma que éste rubro decreció el 47 por ciento en relación al 2009.
La misma fuente señala que las fuentes de financiamiento para este sector de donaciones externas disminuyeron en el corriente año, pasando del 63 por ciento de financiamiento en proyectos de inversión durante 2008, al 23 por ciento en 2010.
Por las razones antes expuestas los medios de comunicación contribuiría a poner este tema en agenda, para refrescar las políticas públicas del Estado en relación a este tema. La semana de la niñez constituye un momento oportuno para saber cuánto es la inversión en salud para este sector de la población.