Abuso infantil: inocencia robada

Sin lugar a duda, las penas similares previstas en el Código Penal Paraguayo para castigar el abuso sexual de niños y el robo y la faena de animales vacunos generan la indignación ciudadana y abren un debate sobre la necesidad de aplicar sanciones más severas para los abusadores y violadores de niños, y es que, los daños y las consecuencias de este hecho son abrumadoras.

Recordemos que el Artículo 135 establece solo hasta 3 años de cárcel o multa para un abusador de un menor; disponiendo un aumento cuando existen agravantes y llegando hasta los 10 años cuando el autor haya realizado el coito con la víctima; mientras que el artículo 136 castiga con hasta 10 años de cárcel a quien cometa robo y faena de animal vacuno.

De acuerdo al psiquiatra Andrés Arce, el niño víctima de abuso sexual sufre serias alteraciones en el neurodesarrollo, que le puede marcar para toda la vida y desencadenar, por ejemplo, bajo rendimiento escolar; pero, la situación puede empeorar si el menor no es tratado adecuadamente, solo con buena contención puede recuperarse.

Por su parte, la psicóloga Alma Segovia señala que un menor de edad víctima de abuso también puede sufrir acoso físico y psicológico y como consecuencia volverse violento; no obstante, coincidieron en que el apoyo familiar es la base para que el niño pueda salir adelante y seguir con su vida.

(La Nación – 6 de setiembre de 2016).