115 millones de niños y niñas en trabajos peligrosos en el mundo

115 millones de niños y niñas en trabajos peligrosos en el mundo

«Ustedes tienen el dinero y la ley, pongan fin al trabajo infantil. Deben trabajar más rápido» Kinsu Kumar, niño de India, retirado del trabajo.

¿Sabías que hoy niños y niñas indios cosen pelotas de fútbol a mano? Pelotas que, sin saberlo, podrían ser con las que jugamos los partidos de los domingos.

Algunas, se venden por 7 céntimos de US$. «40 veces menos que su precio de venta al público» señaló un Haga click aquí (link). «El trabajo infantil continúa existiendo en los tres principales países que fabrican pelotas: Pakistán, China e India» afirmó dicho Estudio.

Niños y niñas uruguayos, al igual que los indios, chinos y pakistaníes, realizan a diario trabajos peligrosos. Por ejemplo, es común ver en Montevideo niños y niñas hurgando en la basura y clasificándola. Se les ve entrar y salir de los contenedores.

La Organización Internacional del Trabajo (OIT), estima que unos 115 millones de niños y niñas están involucrados en trabajos peligrosos en el mundo y 9.4 millones en Latinoamérica y el Caribe (Informe Mundial 2010).

Trabajan en la ganadería, agricultura, industria, minería, servicios, hogares, entre otros. Estas actividades dañan su salud, desarrollo físico, mental y social y su seguridad. Se vulneran sus derechos a la educación, salud, a jugar, descansar, vivir en un ambiente sano, estar con sus familias, entre otros, establecidos en la Haga click aquí (link) (ratificada por todos los países de la ONU, excepto EE.UU y Somalia).

En Ruta

El 10 y 11 de mayo 2010, se reunieron 500 actores de más de 90 países que trabajan frente al trabajo infantil en la Conferencia Mundial sobre Trabajo Infantil de La Haya. Adoptaron una Haga click aquí (link). Ésta fue ratificada en el Plan de Acción Mundial de la OIT.

«…la Hoja de Ruta es una síntesis de nuestra voluntad de poner fin a las peores formas de trabajo infantil.» declaró Dagoberto Lima Godoy, Vicepresidente para América Latina de la Organización Internacional de Empleadores (OIE).

La Hoja de Ruta identifica acciones prioritarias a implementar simultáneamente:

1)      aplicación efectiva de la legislación
2)      oferta de educación gratuita y de calidad a todos los niños y niñas
3)      protección social a las familias y sus hijos/as
4)      políticas del mercado de trabajo, como el empleo juvenil, la regulación y formalización de la economía informal.

Dicha Hoja reconoce las diferencias nacionales y ofrece diversas opciones políticas. Cada Estado deberá decidir, junto con empresarios, sindicatos de trabajadores y sociedad civil, cómo implementarla.

Un punto en común establecido es que todos los Gobiernos son los principales responsables. La sociedad civil y organismos internacionales también tienen un rol clave de apoyo.

Acción uruguaya

El próximo lunes 13 de junio 2011, el Instituto Nacional de Estadística (INE) hará público el Informe Nacional 2010 «Magnitud y Características del Trabajo Infantil en Uruguay». El INE presentará los datos actuales nacionales de la problemática. Las últimas cifras disponibles datan del 2006 (Haga click aquí (link)).

Actualmente, el Estado uruguayo está revisando el listado de trabajos peligrosos, ya plasmado en resolución del INAU de 2006. Se busca consagrarlo en decreto del Poder Ejecutivo, en aplicación del Haga click aquí (link).

Paralelamente, el Estado, empresarios y sociedad civil, juntos están elaborando un Plan Nacional de Acción para erradicar el trabajo infantil en la recolección y clasificación de residuos. Un proceso interinstitucional del Comité Nacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (CETI).

El 29 de abril 2011, Juan Andrés Roballo, Inspector General del Trabajo del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, entregó a la OIT, como Presidente del CETI, la 1ª versión del Plan. Ésta fue elaborada por el sociólogo José Fernández y contempla los aportes de los miembros del CETI.

Desde el MIDES, se recalcó cómo «el abordaje del trabajo infantil en el sector de residuos es imprescindible para el éxito de las metas de erradicación de la indigencia y reducción de la pobreza asumidas por el Gobierno». Además, indicó que la erradicación del trabajo infantil «es parte de los compromisos asumidos por el Estado en el marco de la Estrategia Nacional para la Infancia y la Adolescencia y consignado en su Plan de Acción 2010-2015«.

Dicho Plan frente a una de las peores formas de trabajo infantil, busca definir una estrategia integral a 5 años. Algunos puntos estratégicos:

– regularizar el mercado de trabajo con residuos
– integración socio-educativa-laboral en familias de recolectores-clasificadores
– realizar un cambio cultural
– sensibilizar mediante una estrategia de comunicación

Unicef Uruguay subrayó en el Plan la necesidad de «reforzar las acciones de comunicación sobre la prohibición a toda la ciudadanía». Además, vinculó al sistema de educación formal con la fiscalización del trabajo infantil.

La Asociación Nacional de ONGs (ANONG), relacionó la temática con los problemas de oferta educativa y de vivienda. Propuso «vincular el Programa a los planes de gobierno existentes para el mejoramiento de las condiciones de vivienda e integración social».

Llamado de atención

«Preocupa al Comité la incidencia del trabajo infantil en el Estado Parte, especialmente en el sector de la eliminación de residuos sólidos.» afirmó el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas en su Informe 2010.

El 2 y 3 de noviembre de 2010, el Estado uruguayo fue examinado por dicho Comité. Éste se basó en losInformes Oficiales 3° y 4° entregados por el Estado y en el Informe Alternativo, elaborado por el Capítulo Uruguay de la Plataforma Interamericana de Derechos Humanos, Democracia y Desarrollo.

El Comité emitió recomendaciones concretas al Estado para revertir el trabajo infantil: cumplir con la legislación vigente al respecto; reforzar su marco jurídico conforme a la legislación internacional; y asegurarse «que los niños asistan a la escuela».

Situación de calle

El 22 de marzo 2011, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU adoptó la Resolución «Haga click aquí (link)«. Fue aprobada por 63 países, ente ellos Uruguay, Finlandia y Nicaragua.

Dicha Resolución condena las violaciones a los derechos humanos de unos 100 millones de niños, niñas y adolescentes que trabajan y/o viven en la calle: falta de acceso a servicios básicos, como la educación y sanidad, y todas las formas de violencia, como el maltrato, abandono y trato negligente, los trabajos forzosos, la explotación sexual comercial, la trata y tráfico, entre otros.

Esta Resolución fue resultado de la sesión anual sobre niñez del Consejo de DDHH del 9 de marzo 2011. Este año fue dedicada a la niñez y adolescencia que trabaja y/o vive en la calle.

Se reunieron en Ginebra, Estados, incluida una delegación de Uruguay, ONGs, agencias de la ONU, expertos individuales y adolescentes.

Entre estos últimos, los panelistas Tania (14 años) y Mohammad (16), ambos de Bangladesh, dieron su testimonio como niños que vivieron y trabajaron en la calle. «A veces los niños viven en la calle porque son pobres o su situación familiar no es buena o huyen de la violencia familiar» explicaron.

En su intervención, Paulo Sérgio Pinheiro, Comisionado y Relator de la Niñez de la Haga click aquí (link), afirmó que esta población en las Américas «está entre las principales víctimas de violencia en el planeta, pero hay una ausencia de planes efectivos y falta de servicios para sacarles de la calle». Además, señaló al Estado como «principal perpetrador de la violencia, por comisión u omisión».

Pinheiro apuntó a la prevención como solución, al Estado como principal responsable de garantizar los derechos humanos y a la participación de la niñez en la resolución de sus problemáticas, como condición fundamental.

Los participantes en la sesión, alentaron a los Estados a establecer mecanismos de denuncia frente a la violencia adecuados para la niñez y adolescencia. Muchos son víctimas, por ejemplo, de explotación sexual comercial, y están desprotegidos.

Explotados sexualmente

La explotación sexual comercial es una de las peores formas de trabajo infantil según el Convenio 182 OIT (art. 3). El INAU y la Universidad de la República, confirmaron en 2010 mediante diagnósticos la existencia de este delito en ciudades fronterizas: Bella Unión, Rivera, Río Branco y Chuy. Un Estudio realizado en el marco del Proyecto Frontera «Haga click aquí (link)«. Proyecto que incluye a Uruguay, Brasil, Argentina y Paraguay.

Respecto al trabajo infantil, estos diagnósticos lo identificaron como una forma «encubierta para facilitar la explotación sexual comercial». Por ejemplo, se vinculó este delito con la venta callejera y el trabajo doméstico.

«Iban a la casa de un señor a limpiar (…). Todas menores de edad y una incluso discapacitada intelectual. Les pagaba por eso (…) pero yo sé que le hacía otras cosas, haciendo alusión a favores sexuales.» declaró un entrevistado.

En tres años (2007 a 2009) hubo 20 denuncias de explotación sexual comercial de niños, niñas y adolescentes en Uruguay. En todo el 2010 fueron 17, las mismas que en 2011, hasta ahora, según Luis Purstcher, Presidente del Comité Nacional para la Erradicación de la Explotación Sexual Comercial y No Comercial de la Niñez y Adolescencia (CONAPESCE). Cifras que no reflejan la magnitud del problema.

Cada año, el 12 de junio se conmemora el Día Mundial contra el Trabajo Infantil. En 2011, la OIT hace un llamado a la acción urgente para luchar contra el trabajo peligroso bajo el lema «Haga click aquí (link)«.

En 2013 se celebrará la Conferencia Mundial de Seguimiento en Brasil. Se monitorearán los avances por la eliminación de las peores formas de trabajo infantil. Una meta que debe ser alcanzada por todos los Estados en 2016.

Redacción: Agencia Voz y Vos, Cristina Polo
Programa Proniño

Desde el año 2001, Proniño, programa de acción social gestionado por Fundación Telefónica, enfoca sus acciones en la prevención y erradicación de situaciones de trabajo infantil a través de la educación y el acceso a la tecnología. Este año, en Uruguay, el programa abarcará a 9.000 niños, niñas y adolescentes, en más de 120 centros de educación en los departamentos de Montevideo, Canelones, Treinta y Tres, Paysandú y Maldonado.